¡Bueno chicos! Estreno nuevo blog... y que mejor manera que con una imagen tan potente como ésta. No puedo evitar sentir algo de nostalgia al verla, pues recuerdo que a veces me escapaba para bajar andando entre pinos a la playa, una playa llena de rocas y mimosas. De vuelta a casa, cogía unos preciosos ramos de esos 'pompones' amarillos para decorar la cocina azul (pero que muy azul) de mi madre.
Sentimentalismos aparte, el diseño rezuma masculinidad por todos sus costados. Una línea muy sencilla y fuerte de carácter, formas geométricas y colores claramente marinos. Quizás lo que más me haya enamorado es el uso tan sugerente de la cromática 'naval'. Sin rayas, sin anclas... y para terminar ese toque amarillo que me vuelve loca. Ya puedo ver un pececillo cirujano nadando entre arrecifes :)
Interior visto en
Interiorclip
Sugerencias de paleta: Alfombra de
Joss&Main y vajilla pintada a mano de
Malconttenta
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