Marsala, el color Pantone del año 2015, tiene nombre de ciudad Siciliana.
Como bien nos cuenta su nombre, Marsala es un tono vino seco, un rojo sosegado. Este color nos transporta al sur de Italia, vestidos de blanco y tomándonos una copita en el puerto (...¡dejadme fantasear!).
Me gusta estar al día e investigar... pero reconozco que no soy fan de seguir tendencias. Al contrario de la moda, un espacio se concibe para disfrutarlo el máximo tiempo posible sin que se desfase. Por suerte el color de este año es atemporal, así que si vais de shopping que no os de miedo, ¡es un acierto seguro!
Todos sabemos que el rojo queda bien con los blancos, los tostados, el negro... ¿pero qué tal si salimos de la zona de confort? Las opciones son infinitas, yo os propongo las siguientes:
·Un clásico·
Sin embargo, no todos se atreven a combinarlos. El calor del rojo y la frialdad del turquesa, juntos se complementan resultando vibrantes y divertidos. Son colores con mucha fuerza, por lo que los usaremos menos saturados y combinados con gris y tonos crudos para crear espacios más maduros. Es una fórmula que desde siempre se ha usado y está inspirado en la naturaleza marina, por lo que no dudes en mezclar patrones diferentes, imita la belleza que nos ofrece.
Lámpara: Zara Home
·Buen rollo·
De pequeña me decían que no podía combinar el rojo con el rosa, ¿y sabéis qué?, de pequeños nos decían muchas tonterías. Aquí tenemos un ejemplo perfecto, en el que mezclan el rojo Marsala junto con rosa chicle y amarillo 'pollo'. ¿No es genial? Creo que no hay nada mejor que inspirarse con lo que nos rodea, y este tipo de espacios me recuerdan a un campo de tulipanes: es por ello, que no sólo os debéis fijar en sus colores, sino en su forma. Buscad muebles y cuadros que mezclen líneas rectas con curvas. El resultado, un chute de energía positiva.
·Impresionista·
No apto para todos los públicos, ¡sin duda mi favorito! Atrevido, íntimo, vangüardista... al entrar a una habitación así te sumerges de momento en un cuadro de Gauguin. Aquí el protagonista es el verde, la gracia está en poner pequeños toques de rojo Marsala, convirtiéndolo en una pura anécdota a la que el ojo busca rápidamente, ya que es su color complementario. Con detalles dorados y algún mueble de estilo colonial hará de este espacio una obra de arte.
Cojín: Kimberley Dawn cushions
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